Hoy quiero hablaros de una de mis aficiones que
aunque no se aprece mucho al oficio de escribir, sí que tiene algunas
similitudes (los guionistas no dejan de ser escritores) e incluso podemos volcarlas como ideas de promoción.
Me encantan las series de televisión. ¿A quién no?
Casi todas las que veo son extranjeras. Será que no
he encontrado guionistas que no me defrauden en territorio español. O que soy
demasiado pejiguera. Porque no penséis que todas las extranjeras me gustan,
algunas me han decepcionado también a medida que el número de temporadas avanza.
Si hay una serie que me encante por encima de todas,
que no me haya decepcionado, y que me sorprenda cada día es: SONS OF ANARCHY. HIJOS DE LA ANARQUÍA.
Moteros, sangre y violencia por
un tubo, como se suele decir. Pero también mucho sentimiento y un trasfondo
innegable para los que saben mirar bien y entender entre líneas. Con un toque Shakesperiano que...Ains (colocar aquí un suspiro inmenso de admiración).
Hay algo en la forma de contar, de mostrar, de
imaginar, y de dirigir (porque algunos episodios también los dirige)…, de Kurt Sutter y su grupo
de guionistas, que me vuelve loca.
¿Y sabéis lo que me vuelve más loca aún?
Cuando me compro la temporada y pongo los cds extras
en el dvd, y les veo hablar, y leo los subtítulos (soy un poco maniática para
las cosas del doblaje de ciertas voces), cuando hablan de todo lo relacionado
con el entramado de la serie.
Cuando los actores y Kurt repasan juntos el guión
en una mesa redonda, cuando dan entrevistas y los fans de la serie llaman o
dejan mensajes en las redes y les hacen preguntas relacionadas con la trama…
Cómo se enfrentaron los actores a determinadas
escenas, cómo se sintieron, cuando nos cuentan el motivo de sus personajes para
hacer determinadas acciones. Cuando Kurt
habla de las decisiones que le llevaron a matar a ciertos personajes…
Cada capítulo me deja flipando en colorines (ayer me vi el último emitido hasta el momento y bufff....), pero cuando
les escucho hablar de todo ese contenido y sabiduría al que de otro modo no
accederíamos, me quedo embobada mirando la televisión y en mi corazoncito hay
un sentimiento de satisfacción enorme.
¿Y en mi cabeza?
Oy, my godddd! ¿En mi cabeza?
¡¡Mi cerebro ya arde en planes!!
Porque enseguida me imagino mis pequeñas historias
como si perteneciesen a una película o una serie de televisión. Mis personajes
se convierten en actores y entonces todo cobra sentido, es como si al pensarlo
de esta manera mi historia se hiciese más real… Y entonces un montón de ideas
aparecen frente a mí como venidas del cielo.
-Fotografías de promoción.
-Contenido extra: capítulos eliminados, escenas no
creadas pero que podían haber quedado bien.
-Entrevista a mis personajes como si fueran actores.
¿X, como te sentiste cuándo sucedió tal cosa?
- Fotografías del proceso de creación. Como cuando
te enseñan imágenes del rodaje o tomas falsas. Anda que no me he reído yo con
esas tomas, recuerdo una de Jax y Opie…Ups! 0 spoilers!!
-Cómo nos hemos documentado para escribir: libros,
banda sonora, por qué elegimos esos contenidos…
- Creación de personajes, su ambiente, vestuario…
¿No sería una pasada este tipo de contenido en una
obra literaria?
Cómo una especie de contenido extra solo para
coleccionistas…
Un regalo a quienes acceden al contenido en papel,
por ejemplo: la receta de Mermelada de Tim, en la obra “Cuando no se olvida” de
Anna Casanovas.
O en el blog del autor, como un reclamo a sus
lectores con ese gen cotilla (yo lo tengo), que siempre quiere saber más de los
personajes y para quien la historia siempre es demasiado corta.
Mi amiga Carmen
María Cañamero, me dijo una vez que había eliminado muchas cosas de la
segunda parte de una de sus obras, (el contenido paja que llamamos los
escritores y también los lectores) y que sería bonito regalárselo al lector como contenido extra. Yo
la animé hacerlo ¿lo hará? Quién sabe…pero como lectora me encantaría
descubrirlo.
Desde entonces, desde sus palabras, no paro de
reflexionar sobre ello. Sobre ese contenido extra que quizá anime a los
lectores a querer saber un poquito más del universo que hemos creado.
No tengo la genialidad de Kurt Sutter ni de sus guionistas, pero entre tanta brainstorm, quizá se me ocurra algo
interesante.
Y a vosotros, ¿os gustan estos contenidos extras de
las series? ¿Qué series os gustan?
¿Creéis que solo puede aplicarse al cine o a las
series televisivas, o por el contrario os gustaría encontrarlos también en
obras literarias…?
Contadme!!
Soy toda ojitos!!
Un abrazo pre-Samhain!!! Que una proviene de tierras celtas!!